La llegada de FILDU

La nueva Alcaldía ya ha comenzado a dar sus primeros pasos y con lástima asistimos a ver que se repiten los mismos errores. Apenas han pasado unos días y ya observamos el mismo espectáculo de la legislatura pasada, el Alcalde dando instrucciones directas a los empleados municipales de servicios múltiples.

Entendemos que quien mas sabe de la materia sobre poda, limpieza, necesidades y frecuencia de las tareas, son los propios empleados, añadido que tienen en el puesto de la aparejadora municipal, su referente como coordinadora de la programación de los trabajos. No creemos que nadie tenga que enseñarles su trabajo, su profesionalidad está demostrada y avalada por su amplia experiencia.

Pues no, aquí parece que los Alcaldes de Agrupación Puentesina son versados en todas las materias, como los hombres de renacimiento, con un gran conocimiento y experiencia en muy diversas ciencias y humanidades, con lo cual es lógico que de modo directo se ocupen de la asignación de tareas, orden y prioridad de las mismas.

Discrepamos en este estilo de Alcaldía, no creemos que estas sean las funciones propias de un Alcalde, máxime recién tomada la Alcaldía.

Las primeras acciones deberían ir en el camino de conocer el estado actual del Ayuntamiento, su funcionamiento, asuntos pendientes de la pasada legislatura, la puesta en marcha de la nueva corporación con la junta de gobierno y comisiones por áreas, establecer contactos con Gobierno de Navarra, informarse sobre ayudas y subvenciones etc etc.

Pero no, FILDU (como le han puesto ya de sobre nombre) se dedica a actuaciones populistas, muy aparentes pero que realmente aportan muy poco al Pueblo.

Sería mucho más efectivo, si de verdad quiere dedicarse a la jardinería, que se preocupase de que los empleados cuenten con los medios minimamente necesarios. Parece, no ya del 3º mundo, si no del submundo, el equipamiento del que disponen. Tener que cortar la hierba y maleza, con el cortacésped de esquinas y remates (con un disco de 25 cm de diámetro) y luego recogerla manualmente, cuando con una muy pequeña inversión se podría adquirir mejores útiles y maquinaria, que se amortizaría en menos de un año por el ahorro de horas de trabajo, horas que podrían ir dedicadas a tareas que se quedan sin hacer en la actualidad.

Aquí chocamos con el corto alcance miras de los últimos Alcaldes, parece que es mejor que se les vea en la calle con los empleados, que estos últimos pasen muchas horas en la calle, dando sensación de hacer mucho, cuando en realidad están siendo mal empleados los recursos municipales, quemando moralmente a los propios empleados, que son los primeros que se dan cuenta de esas no son maneras de trabajar, que con un poco más de equipamiento se podría alcanzar mucho más, pero parece que el concepto horas hombre no entra en la cabeza de algunos, en ocasiones para ahorrar hay que gastar primero.

Los tornillos no se sueltan con los dientes, habrá que comprar destornilladores.

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